Merlí

Con el nuevo curso llega una nueva y provocadora estudiante. Pol deja las clases por presiones familiares y Merlí discute con el padre del joven para que vuelva.

Merlí y Coralina, la nueva jefa de estudios, no empiezan con buen pie. Marc intenta echarle una mano a su hermano menor, que no se porta bien y saca malas notas.

Joan le pide a Merlí que le aconseje con su novia, pero será Merlí quien aprenda algo. La tensión entre Oliver y su madre alcanza un punto crítico.

Merlí le cuenta a su madre una mentira de la que debería avergonzarse. Entre Gerard y Oksana saltan chispas. Pol le dice a Bruno que se sientre atraído por su nueva jefa.

Millán le confía un secreto a Glòria. Tània sale en defensa de Berta durante la clase de Coralina, pero se acobarda a la hora de confesarle a Marc lo que siente por él.

Pau recibe un castigo por tirarle un boli a una profesora amargada. Mientras tanto, entre Tània y Marc la cosa parece avanzar y Pol y Míriam tienen una bronca de espanto.

Cuando Coralina intenta deshacerse de una profesora transgénero, los alumnos organizan una protesta. Marc le pide a la abuela de Bruno algunos consejos profesionales.

Mònica se harta de los celos de Joan. Gerard descubre lo que Oksana se dedica a hacer cada tarde. Oliver comparte con Merlí un recuerdo traumático.

Gerard hace de canguro durante una tarde. Tània le confiesa a Marc lo que siente por él. Millán toma una decisión sobre su futuro.

Coralina intenta que Ivan dude de su madre e insta a Bruno a que se vaya a vivir a Roma. Joan trata de convencer a Mònica para que cambie de parecer.

La madre de Gerard obliga a su hijo a ser consciente de lo que conlleva salir con Oksana. Pol se disculpa con Ivan. Marc y Pau visitan a su madre en el trabajo.

Joan ya no quiere ser un "buen chico" y decide probar cosas nuevas. Oliver les anuncia algo a sus padres. Bruno se despide de las personas a las que más quiere.

Pol descubre que su hermano guarda un secreto. Los alumnos se cuelan en el insti de noche y montan una fiesta de Navidad salvaje. A Coralina, el karma le pasa factura.