Alli Abajo

La clínica Híspalis se pone en marcha con medio hospital todavía en obras para solucionar los problemas de aluminosis. Los retrasos en las obras hacen que el hospital no termine de abrir y que Don Benjumea atraviese por problemas financieros, lo que obliga a incorporar a un nuevo e inesperado socio mayoritario a la clínica.

En el sur, Carmen intenta asumir las noticias de que Iñaki tiene otro hijo, al tiempo que él descubre que cuidar de dos criaturas es mucho más complicado de lo que esperaba. En la clínica, el señor Wan, el nuevo inversor chino, impone sus nuevas y exigentes normas. Carmen, Jozé, Dolores, Koldo e Irene se las ven y se las desean para atender a un paciente cada ocho minutos.

Wan el nuevo accionista mayoritario de la clínica le pide a Carmen que se encargue de despedir a todos aquellos empleados no sean de primer nivel. Jozé, Dolores, Koldo, temen por sus puestos e intentarán contentar a Wan de diferentes formas. Lo peor es que sospechan que Carmen se ha aliado con Wan para echarles, así que idean un plan para vengarse de ella.

Jozé, Irene y Dolores no se resignan a ser despedidos y acuden a la Híspalis a luchar por sus empleos. Cuando Dolores descubre que Carmen está encantada con Jin, la empleada que la sustituye se pone celosa y decide espiarla para encontrar algún punto débil... hasta que, por accidente, rompe una máquina de neurocirugía puntera. Carmen e Iñaki deciden vivir juntos.

Desde que Carmen ha vuelto a ser enfermera, Jin no para de hacerle la vida imposible. Dolores y ella descubren que Wan busca marido para Jin, así que Carmen, junto a Dolores, que quiere volver a ganarse el favor de los chinos, deciden hacerle una cita a ciegas.

Iñaki sube al norte a intentar reconciliar a la cuadrilla, que está separada como nunca. Cuando ve que ninguno de los dos bandos atiende a razones, decide engañarles para hacer un escape room y les encierra en una habitación, con un juego de enigmas relacionados con la cuadrilla.

Carmen e Iñaki reciben una visita inesperada: Gotzone viene a pasar unos días a Sevilla con la excusa de ayudarles con Jon, pero pondrá patas arriba la rutina familiar, desesperando a Iñaki y Carmen, que no saben cómo decirle que se vaya. Wan ha reubicado a Dolores, Koldo, Jozé e Irene en nuevos puestos con diferentes turnos pero ninguno de ellos está contento porque no se ven.

Iñaki le pide a Carmen que se lleve bien con Gotzone, porque es una suerte que Jon tenga dos madres. En la clínica, Dolores, Irene y Jozé se estrenan en el turno de noche y tendrán que luchar contra una enfermedad que no tiene cura: el sueño. Jozé además, tendrá que compatibilizar el trabajo con su nuevo cargo de alcalde.

Para agradecer que cuiden tan bien a Jon, Gotzone les regala a Carmen e Iñaki un pack de experiencias de cena y hotel. Iñaki está ilusionado por poder pasar tiempo a solas con Carmen, pero Carmen no se fía de dejar a Gotzone con los niños, así que convencen a Dolores para que haga de canguro junto a Gotzone.

Cuando los trabajadores de la Híspalis se enteran de que Wan va a vender parte de la clínica, deciden comprarla ellos. Pero sólo tienen unos días para conseguir el dinero. Mientras todos remueven cielo y tierra para juntarlo, Jozé e Irene encuentran la manera: casarse y reunir de ese modo el dinero de los regalos. Así que organizan una boda express que trastoca de golpe la vida de todos.