CLARENCE

Luego de que el señor Reese encuentra su preciado auto sucio con salsa de albóndigas, llama a Clarence para que lo ayude a averiguar quién es el culpable.

Sumo descubre a un correcaminos herido, lo bautiza "Hot Sauce" y lo cuida hasta que está sano. Los dos se convierten en amigos inseparables, pero un animal salvaje no puede estar encerrado.

Clarence está súper entusiasmado por visitar a su abuela y se entera de que Chad nunca voló en avión. Clarence decide que su misión será ayudar a Chad a superar ese vuelvo caótico.

Clarence y sus amigos se dirigen a la Feria de Aberdale. Clarence cree que una obra teatral medieval es realidad y jura impedir que el "malvado" caballero negro se quede con la princesa.

Clarence dibuja una historieta para el periódico escolar y se convierte en un éxito absoluto entre los niños.

Cuando, por accidente, Clarence rompe un juego de la galería comercial con el que Jeff está obsesionado, Clarence monta su propia versión realista del juego en su casa.

Cuando Clarence está convencido de que tiene el poder de manipular el tiempo, promete usar sus ¿habilidades¿ únicamente para hacer el bien. Sin embargo, un día en la escuela pone a prueba los principios de Clarence cuando queda entre la espada y la pared: o ayuda a sus amigos o pone el tiempo en pausa para divertirse.

Cuando los queridos juegos de plaza de la escuela Aberdale son reemplazados por alternativas seguras y aburridas, Clarence y la pandilla salen a buscar sus antiguos juegos en el legendario parque de los juegos perdidos.

Cuando Clarence, Jeff y Sumo hacen un mural sin permiso en una pared de la escuela Aberdale, el castigo es ir a la escuela un sábado para limpiar.

Clarence, Jeff y Sumo investigan una fiesta de estudiantes de preparatoria porque la confunden con una invasión extraterrestre.

Luego de una parada técnica para ir al baño durante una excursión escolar, Clarence regresa al estacionamiento y, por error, se sube al autobús equivocado, ¡que lo lleva a una escuela diferente!

Clarence convoca a Larry, su excéntrico vecino, para que los ayude a los tres a salir a tomar un helado... ¡y a dar el paseo de sus vidas!

Cuando Clarence pierde la pelota durante un juego de fútbol, la sigue hasta llegar a un edificio de oficinas, donde lo confunden con el hijo del jefe y le dan permiso para andar libremente por todos lados. ¿Escalará Clarence hasta la cima de la escala corporativa o correrá peligro su puesto?

Cuando Clarence y Sumo provocan un corte de luz en la casa de Sumo, los envían al desierto caliente -junto con el hermano mayor de Sumo- a recuperar parte de un generador. ¿Sobrevivirán la travesía o la rivalidad entre Sumo y su hermano llegará al punto de ebullición?

Después de perderse la oportunidad de ver el estreno del avance de la nueva película de Robofrog, el trío diseña un plan para entrar a escondidas en el teatro y darle un vistazo antes que los demás. Sin embargo, cuando estropean el rollo... ¡se ven obligados a repararlo si no quieren admitir lo que hicieron!

Luego de leer en clase un libro sobre una sociedad animal mística, Clarence se inspira a juntar animales de la zona y recrear su propio mundo animal para alegrar a su amigo Percy. ¿Pero acaso Percy llevará el juego demasiado lejos?

Mientras está de compras con su mamá, Clarence descubre a Breehn oculto detrás de un perchero de ropa. Con la excusa de probarse ropa para sus mamás, los niños se escabullen para encontrar un programa de juegos local que se está filmando dentro del centro comercial de Aberdale.

Clarence y unos pocos estudiantes encuentran el diario íntimo viejo y crujiente de Coogan, lleno de pistas que conducen a un tesoro misterioso. Clarence encabeza el equipo de buscadores de tesoros para atravesar los peligros de Aberdale, en busca del Ojo perdido de Coogan.

Mientras Sumo y Clarence juegan al aire libre, Chelsea y Rita salen a patinar en sus nuevas patinetas. Esto capta la atención de Sumo, que decide construirse su propia patineta y unirse al equipo de patinadoras, mientras que Clarence parece tener otras ideas en mente...

Cuando Clarence y sus amigos llaman a números al azar para hacer bromas telefónicas, Clarence llama a una chica y ambos terminan entablando una amistad. ¿Pero cuánto durará esta amistad telefónica a larga distancia?

Cuando inesperadamente la maestra Baker se toma un día libre por motivos personales, la reemplaza una maestra sustituta a la que le cuesta mucho manejar a la clase de estudiantes revoltosos. Pronto, la escuela se ve envuelta en caos y Clarence es el responsable de regresar a la maestra Baker al lugar al que pertenece: el salón de clases.

Agotado por tantas aventuras, Clarence se esfuerza por conseguir un momento de calma sin hacer absolutamente nada.

Cuando Clarence descubre una nueva peculiaridad sobre su amigo, Jeff le ruega que no cuente nada. ¿Podrá Clarence resistir el deseo de exponer el secreto de Jeff ante toda la escuela?

Mientras Clarence está distraído a causa del poder misterioso de la Luna, su clase compite por construir el cohete volador más alto. ¿Podrá el cacharro que Sumo fabricó en su casa vencer al cohete que Belson compró en una tienda?

Cuando la maestra Baker pone a los niños en parejas para que actúen como ¿padres¿ de un brote, Sumo y Clarence aprenden todo lo que hay que saber sobre una buena crianza, Jeff le compra juguetes en lugar de fertilizante, y Chelsea y Kimby aprenden a conocerse mutuamente.