Billy The Kid

La Guerra del condado de Lincoln está a punto de estallar a lo grande. Billy se unió al inglés John Tunstall en su batalla comercial contra el mayor Murphy y la Casa, pero jugadores aún más grandes acechan en el trasfondo y hay mucho en juego.

Comenzó la guerra, pero hospitalizan a Tunstall por viruela. Las amenazas contra él lo hacen replantearse su estrategia e intenta hacer las paces con la Casa. Pero el camino al infierno, como él y Billy saben, está lleno de buenas intenciones.

Billy y los Reguladores se enteran de que asaltarán el rancho de Tunstall. Tunstall decide hacer frente y los sucesos dan un giro inesperado. Billy y Jesse se enfrentan de nuevo en combate, esta vez con trágicos resultados.

Los Reguladores están a la defensiva desde el comienzo de la guerra, pero Billy elabora un plan que pondría fin a esta. Un extraordinario tiroteo marca el inicio de la campaña y prepara el terreno para una nueva oleada de asesinatos.

Los del Tobosco no pagan su deuda, lo que deriva en una emboscada por la Banda de los Siete Ríos. Mientras tanto, Billy jura que él y los Reguladores tomarán Lincoln y eliminarán a los matones. Pero hay un nuevo alguacil.

Billy y los Reguladores convierten la casa de McSween en su cuartel, y los mexicanos los apoyan. Una confrontación con la Banda de los Siete Ríos desata una balacera. La guerra alcanza otro nivel, y restaurar la paz parece algo imposible.

Con el bloqueo de Lincoln, en The House celebran lo que consideran una victoria sobre los Reguladores. Cuando un vigilante de los Reguladores le dispara a un soldado, la casa McSween se incendia, lo que causa más muertes y más conflicto.

Frustrado con la habilidad de Billy para escapar, Thomas Catron planea una trampa para atraer a Billy y arrestarlo. Pero los Reguladores atacan la cárcel mientras Billy, con la ayuda de Dulcinea, logra escapar una vez más.