Demon Slayer: Kimetsu no Yaiba

El grupo de Tanjiro, tras concluir la misión del Tren infinito, se ha rehabilitado en la Finca Mariposa.

Tanjiro, Nezuko, Zenitsu e Inosuke acompañan a Uzui en una nueva misión. Sus pasos les llevan al barrio del placer, cuyos establecimientos dan luz y color a las noches de la capital.

Tanjiro, Zenitsu e Inosuke se disfrazan para entrar a formar parte del servicio de tres casas distintas del barrio del placer. Su objetivo es obtener información de las desaparecidas esposas de Uzui.

Daki, la Sexta Luna Superior, ha coincidido con Zenitsu. Este intuye que se trata de un demonio y Daki también percibe que el chico es un enemigo.

Uzui interroga al dueño de la casa Tokito sobre la oiran Warabihime y sospecha que se trata de un demonio.

Tanjiro sufre los embates de Daki mientras se zafa de ellos con la Danza Sagrada del Dios del Fuego.

Nezuko acude providencialmente al rescate de Tanjiro, quien se encontraba en grave peligro. Los ataques de Daki, sin embargo, provocan que Nezuko se convierta en una criatura cada vez más similar a un demonio.

Uzui se lanza a por Daki y un segundo demonio que ha surgido del interior de esta, Gyutaro. El Pilar sufre enfrentándose a dos temibles adversarios de manera simultánea.

La ayuda de Hinatsuru y su antídoto de glicinias permite que Uzui y Tanjiro estén a punto de pillar desprevenido a Gyutaro, quien bloquea su ofensiva in extremis.

Los embates de la faja de Daki destrozan edificios enteros y sepultan a Tanjiro. Cuando abre los ojos, aún rodeado de escombros, se encuentra con un panorama desolador.

Tras una batalla apoteósica, Tanjiro y Uzui consiguen decapitar a Uzui y Zenitsu e Inosuke hacen lo propio con Daki de manera simultánea.