Luis atraviesa una difícil situación económica. Con la muerte de su madre, hereda una casa en otra ciudad y decide enviar a su familia por delante. Al llegar descubren una muñeca escondida en la casa, alterando la paz de un espíritu que habita el lugar. Los recién llegados no creen en fantasmas, pero los ecos de la casa podrían hacerlos cambiar de opinión.