Garzón Vive

Tras lanzar fuertes críticas contra políticos, figuras públicas del país e integrantes del Ejército a través de sus programas de humor, Jaime Garzón recibe una amenaza de muerte; se entera que la misma proviene del jefe paramilitar, Carlos Castaño, y trata de persuadirlo, buscando una cita con él, acude a Pinto Bermúdez, a quien incluso llega a visitar en la Cárcel Modelo de Bogotá.

En medio de su inesperada muerte, Jaime Garzón recuerda episodios de su infancia y cómo fue forjando ese pensamiento crítico que, a la larga, le terminaría constando la vida. Así mismo, se relata cómo, pese a que las amenazas fueron aumentando, el periodista y humorista hizo caso omiso a las recomendaciones de sus familiares de que debía andar con escolta para resguardar su integridad.

La familia Garzón afronta problemas económicos, que se acrecientan por la enfermedad que padece Tobías, padre de Jaime. Sin embargo, todo empeora cuando se enteran de que un amigo de Tobías, en un acto de mala fe, le hizo firmar un poder a él en el que lo autorizaba a manejar algunos asuntos de la escuela de tabulación donde era docente; así, el acuerdo se haría efectivo más adelante.

Desde el primer día, Jaime Garzón afronta problemas en el seminario debido a que era curioso y expresaba libremente sus ideas. Por otro lado, se vive un ambiente tenso en el país por las elecciones presidenciales que se desarrollan. Mientras tanto, Jaime se cruza con Soledad que aprovecha el momento para promover el candidato que respalda pese a que eso podría poner en riesgo su integridad.

Jaime Garzón es sacado del seminario debido a una broma que resultó ser de muy mal gusto para los padres. Más adelante, conoce a 'El Mono' y a Gabriel, al tiempo que habla con Soledad, quien lo convence de dar clases. Aunque lo instruye sobre cómo dar las lecciones, Jaime termina defraudándola, pero él no se da por vencido y prepara una nueva lección con la que sí espera descrestarla.

Jaime Garzón aprende de los errores y da una nueva clase sobre derechos humanos, la cual deja gratamente sorprendida a Soledad; no pasa mucho tiempo para que Jaime se deje atraer por Soledad a quien se atreve a robarle un beso. Por otro lado, Graciela le enseña a leer a Cravis cuando recuerda que en su infancia ella no tuvo la suficiente educación para aprender a leer y a escribir.

Luego de que Jaime le robara un beso, Soledad se siente extrañada y habla con él, donde le dice que una relación entre los dos es imposible, sobre todo, por el cargo que ella sostiene de maestra y él de alumno. Sin embargo, el amor de los dos está muy lejos de tener un final feliz. Por otro lado, Graciela empieza a sospechar de Jaime y cree que tiene una enamorada en La Normal donde estudia.

Graciela confirma sus sospechas y al enterarse del posible amorío entre su hijo Jaime y Soledad habla con Zulema, directora de La Normal, a quien le cuenta todo, eso hace que Jaime sea cambiado de sede; sin embargo, termina más involucrado con Soledad cuando ella le cuenta que estuvo detenida por seguir la ideología de izquierda y promover las ideas del cura revolucionario Camilo Torres.

Jaime se entera de que existen los grupos de estudio y se interesa por el tema, por lo que le pide a Soledad que lo deje hacer parte, pero solo podrá lograrlo cuando se gradúe del colegio. Más adelante, Jaime llega de sorpresa a la casa de Soledad y conoce a su padre, Ramón, quien tiene una primera mala impresión de él; considera que es una persona que hace comentarios muy imprudentes.

La corta relación entre Jaime y Soledad termina luego de que Garzón arma una rebelión contra los profesores de La Normal, además, un amigo de Jaime, enviado por Graciela, habla con Soledad y le exige que deje esa relación con el joven estudiante. Entre tanto, Jaime sigue obsesionado con encontrar el libro que su mamá le decomisó, y le pide ayuda a Cravis quien inocentemente le ayuda.

Jaime Garzón es finalmente expulsado del colegio, lo que impulsa a Soledad a dejar para siempre su relación amorosa con él, pese a ello Jaime no se rinde y continúa llamándola, buscando ganarse su confianza de nuevo. Por su parte, Graciela sostiene una fuerte discusión con Jaime y le dice que desde ahora deberá buscar por sus propios medios la forma de seguir con su formación académica.

Sin permiso de su madre, Jaime saca elementos de su casa, entre ellos unos zapatos, y se los regala a niños de la calle. Días más tarde, Jaime se gradúa como bachiller y queda gratamente sorprendido al ver allí la presencia de Soledad quien estaba distante desde que dio punto final a su relación. Al tiempo, Jaime es premiado por su labor como educador en el colegio y recibe otro galardón.

Aún sintiendo algo por Jaime Garzón, Soledad decide embarcarse en un riesgoso viaje, todo con el objetivo de seguir afianzando sus pensamientos ideológicos de izquierda. Pero al poco tiempo Soledad vuelve a casa y se reencuentra con Jaime quien trata de convencerla de que retomen su relación sentimental. Por otro lado, Cravis se conmueve de un celador y decide llevarle comida.

Cravis pasa un momento amoroso difícil al no ser correspondida como esperaba por el celador del barrio donde vive y quien le gustaba; Jaime y Graciela buscan consolarla a la joven con palabras de aliento. Por otro lado, Jaime recibe buenas noticias al conseguir trabajo en el colegio donde también dicta clases Soledad. Además, Soledad le hace a Garzón una propuesta difícil de rechazar.

Jaime y Soledad deciden marcharse a un lugar para encontrar algo de paz: escogen Melgar y allí consuman su amor en una noche romántica. Más adelante, al regresar a su casa, Jaime es abordado por su madre, quien le reclama por lo sucedido. A raíz de esto, el joven le confiesa que ama a Soledad. Pero Graciela recibe otra mala noticia pues se entera de la expulsión del seminario de Mariano.

Jaime se preocupa por los niños que carecen de un techo y, a través de su centro de estudio y con el respaldo de Soledad, decide brindarles un apoyo mucho más cercano. Al tiempo, ambos jóvenes fortalecen su relación sentimental y pasan más tiempo juntos después de que Jaime decidiera ayudarle a Soledad con la realización de sus tesis; esto le incomoda mucho a Ramon, padre de la mujer.

Jaime Garzón da un paso importante en su objetivo de fortalecer su centro de estudio, dialoga por primera vez con varios de los integrantes, aunque no le cae bien a uno de ellos. Al tiempo, se desata una tormenta luego de que Ramón encontrara unas fotos intimas de Soledad en su habitación, no tarda mucho en darse cuenta de que allí, posan ligeros de ropa, la joven junto a Jaime.

En medio de una inesperada situación, Graciela termina conociendo a Soledad, el amor de su hijo Jaime; ambas mujeres cruzan saludo cuando acuden al hospital a visitar a Jaime, quien había sufrido un accidente de tránsito. Aunque se recuperaba de las heridas que le había dejado el incidente vial, Garzón no pierde tiempo y coquetea con una doctora del centro médico.

Al ver que coqueteaba con una doctora en el hospital, Soledad se molesta mucho con Jaime, sobre todo, después de que le hubiera dejado un regalo en su casa, el cual encontró Garzón al regresar desilusionado. Sin embargo, una amiga de Soledad le dice que debe reflexionar sobre su actitud con el joven. Además, Jaime sostiene una fuerte pelea con Leonardo que provoca la presencia de la Policía.

Luego de que Jaime terminara en la estación de Policía por su pelea con Leonardo, Graciela reflexiona sobre su hijo y cree que lo mejor para la familia es que él se vaya de la casa, hecho que deja muy sorprendido a Garzón. Jaime trata de retomar su trabajo como profesor, pero las cosas no salen como las esperaba y termina partiendo de su casa con un destino muy lejano para seguir estudiando.

Jaime Garzón no la pasa bien en Barranquilla, en donde vive para continuar con sus estudios de ingeniería de aviación; no obstante, la visita de Soledad le cae bien y le devuelve las ganas de seguir adelante. Por otra parte, Mariano medita si es conveniente presentarle su novia Adri a su madre, aunque todo termina saliendo bien y Graciela considera a la joven como "muy encantadora".

La historia vuelve a repetirse contra Jaime Garzón, y como había ocurrido en el seminario y el colegio, termina expulsado de la Escuela de Aviación por exigir mejores condiciones para su educación. Por tanto, decide regresar a Bogotá, pero allí las cosas no están mejor pues encuentra al padre Luzardo en delicado estado de salud y a Soledad más decepcionada de su relación sentimental.

Jaime se estrena como piloto, pero aterriza de emergencia en Mariquita, solo por ir a orinar, lo que más adelante causaría que le revocaran la licencia de piloto. Por otra parte, Garzón se reúne con sus amigos de pensamientos revolucionarios y en medio de risas les propone fundar un nuevo movimiento en el que puedan seguir estudiando el país, generar ideas de cambio y así seguir viéndose.

Tras perder la licencia de piloto, Jaime Garzón se inclina por la carrera de derecho por consejo de su amigo 'Dino'. Aunque Soledad no está muy de acuerdo, Jaime se presenta a la Universidad Nacional a hacer el respectivo examen de admisión, en medio de ello, conoce a una nueva mujer que llegara a revolverle la vida, al tiempo hace un nuevo amigo, a quien apodan 'El Negro'.

En medio de una fiesta de matrimonio, Jaime entra en defensa de un niño a quien otros menores están molestando y maltratando por su desgastado vestuario. Ese niño, llamado Ricardo, resultaría ser hijo de Yolanda, una mujer que impactó de primer momento a Jaime e hizo que quisiera acercarse más a ella. Ambos conversan, y Yolanda le cuenta lo traumático que ha sido su divorcio de Ovidio.