Consuelo

Ingrid tiene ideas liberales acerca del placer, que chocan con las creencias de la sociedad conservadora en la que vive. Sin importarle el qué dirán, le propone a Consuelo un negocio prometedor de venta de masajeadores para mujeres.

Inmersa en una sociedad machista, que juzga a las mujeres por comportamientos fuera de la 'moral conservadora', Olga se encarga de 'castigar' a Consuelo por dedicarse a vender masajeadores a sus amigas. Ella promueve las buenas costumbres.

En una sociedad conservadora y tras ser abandonada por su esposo, un ama de casa, debe encontrar la manera de salir adelante. Luchando contra sus propios prejuicios y con una personalidad encantadora, Consuelo comienza a vender masajeadores para mujeres.

1955. Consuelo, una ama de casa de la alta sociedad, tras ser abandonada por su esposo, acepta la insólita propuesta de vender vibradores. Pronto descubre que el negocio es sorprendentemente próspero y la empodera de su destino y sus placeres.

Con un guion maravilloso y un diseño de producción espectacular, una ama de casa de la alta sociedad que vive en una época difícil y extremadamente conservadora para las mujeres, comienza un negocio de venta de 'masajeadores' para mujeres.