En esta divertidísima parodia de Hollywood, el nominado al Oscar Albert Brooks interpreta a un guionista que pierde su chispa de la noche a la mañana y busca desesperadamente un medio de recuperarla. La recomendación de un amigo le lleva hasta Sarah (nominada al Oscar Sharon Stone), una mujer excéntrica que afirma ser hija de Zeus y, por tanto, una musa.