Un grupo de jóvenes futbolistas encabezados por Dani Ceballos, Fabián y Mikel Oyarzabal enfrentaron el reto de ganar el quinto título de la Eurocopa sub-21. Una derrota en el primer partido y las lesiones incrementaron la dificultad, pero el grupo entrenado por Luis de la Fuente superó los obstáculos y se convirtió en campeones de Europa.