Cimarron

Crown lidera una partida que persigue a la banda de Ace Coffin. Estos son puestos en peligro por uno de sus miembros, que sólo está interesado en la recompensa por la cabeza de Coffin.

El forajido Jud Starr es rescatado por su banda y, juntos deciden asaltar Cimarron Strip. El sheriff Crown lo captura en la víspera de una boda india y debe llevarlo de vuelta a Cimarron.

Crown detiene al hijo de un ranchero. Cuando el predicador se recupera y se niega a presentar cargos, el propietario de una taberna y su compinche organizan un linchamiento.

Cuando el Congreso cancela los arrendamientos gubernamentales de las tierras de pastoreo utilizadas por los ganaderos, estalla una guerra entre los rancheros y los posibles colonos.

El marshal Crown detiene a dos forajidos, los hermanos Gauge, que vivirán bajo su techo mientras investiga su posible participación en un asesinato.

Tras desafiar a la suerte en un espectáculo del salvaje Oeste, un joven indio muere. Crown debe entonces evitar que el padre del muchacho, un jefe indio, vengue la muerte de su hijo.

Un joven forajido secuestra a Dulcey para poder vengarse del Marshal Crown y del jefe de la banda que lo traicionó.

Los residentes de Cimarrón, están hartos de que la caballería trate la zona como si fuera su patio del recreo, actuando de forma inesperada sin preocuparse por nada ni por nadie.

El alguacil Crown consigue sobrevivir milagrosamente a dos disparos durante un intento fallido de dos hermanos forajidos de liberar a un tercero, que había sido arrestado por asesinato.

MacGregor persigue a un prisionero fugado que resulta muerto en un tiroteo. Un sheriff, enemigo de Marshal Crown, lo arresta y es acusado de asesinato y sentenciado a morir ahorcado.

El sheriff Jim Crown impone la ley en Cimarron Strip, una región desértica entre Kansas y Oklahoma habitada por granjeros que limita con territorio indio.

El Vaquero Mobeetie, se convierte en un dolor de cabeza para Jim Crown durante una ola de calor, cuando un vagón de tren cargado con dinamita queda abandonado en medio de las vías.

Unos cazadores ponen en jaque a los ciudadanos de Cimarron Strip. Deciden matar ganado para sobrevivir pero Jim Crown les ofrece una solución.

Crown contrata a un pistolero manco como ayudante, sin darse cuenta de que el hombre ha asumido la identidad de un agente de la ley asesinado y quiere vengarse de su antigua banda.

Crown condena a un jefe a ocupar el puesto de Marshal, para que lo haga coincidir con las penas de trabajos forzados que sus hombres están cumpliendo por diversos delitos.

Crown y su grupo frustran un robo de nóminas. El líder de la banda es condenado a diez años de prisión, pero Crown no puede reunir pruebas suficientes para acusar al miembro más joven.

Crown recibe un disparo mientras persigue a una banda de forajidos asesinos. Heller, una joven criada por indios pero que ahora trabaja para la banda de forajidos, lo encuentra y lo esconde.

Crown emprende la caza de un asesino en serie. Francis le cuenta a Crown cómo en Londres no resolvieron unos asesinatos similares cometidos por Jack el Destripador.

El problemático sargento Clay Tyce tiene la misión de patrullar los alrededores en busca de cuatreros, pero él elude su deber y se va a la taberna.

Mientras escolta a un hombre a su juicio en Nuevo México, Crown es atacado por un par de forajidos y despojado de su placa e identificación.

Un ex convicto secuestra a Francis y obliga al alguacil Crown a ayudarle a rescatar a varios prisioneros que son enviados a la prisión federal en un tren especial.

Crown intenta ayudar al comandante Covington a capturar a su hijo, experto en dinamita, que ha desertado del ejército y se ha unido a una banda de delincuentes asesinos.

Una familia de granjeros está tan asustada después de ver a dos hombres linchados por la banda de un ranchero, que se niegan a cooperar con Marshall Crown.