Avatar: La leyenda de Aang

Una joven maestra agua, llamada Katara, y su hermano, Sokka, descubren un iceberg gigante mientras pescan cerca de su casa en el Polo Sur, y descubren que adentro hay un muchacho, llamado Aang.

Después de que Aang accidentalmente encendiera fuego una trampa de la Nación del Fuego, es desterrado del Polo Norte. Poco después el príncipe Zuko ataca a la Tribu del Agua del Sur en un intento por capturar al Avatar. Aang regresa y se rinde ante la Tribu del Agua.

Aang está ansioso por llevar a Sokka y Katara al Templo del Aire donde creció. Pero al llegar se da cuenta de que el templo no es como lo recuerda.

En uno de los pequeños desvíos de Aang, el grupo se dirige a la isla de Kyoshi. Pronto comprenden que la gente del pueblo no confía en los extraños. Sin embargo, cuando Aang demuestra que es el Avatar, son tratados como huéspedes de honor.

Aang lleva a Katara y Sokka de regreso a su lugar favorito, donde solía ir de pequeño, la ciudad de Omashu en el Reino Tierra. Pero cuando quebrantan la ley, son llevados ante el Rey para ser castigados.

Los niños llegan a un pueblo de la Nación Tierra que está ocupado por la Nación del Fuego. ¿Inspirarán los intentos de Katara a la gente oprimida a ayudarlos, o a lastimarlos?

Aang, Katara y Sokka llegan a un pueblo aterrorizado por una fuerza misteriosa del mundo espiritual. Aang no sabe cómo ayudar a esas personas, y se da cuenta de que tiene mucho que aprender sobre ser el Avatar.

Durante el solsticio de invierno, Aang debe llegar a un templo de la Nación del Fuego, sorteando la vigilancia del Príncipe Zuko, el Comandante Zhao y los Sabios del Fuego.

Después de intentar enseñar a Aang a dominar el agua, Katara está desesperada por mejorar sus habilidades.

Mientras viajan hacia el Polo Norte, el grupo casi es capturado por la Nación del Fuego.

Cuando Aang y sus amigos llegan al borde de un cañón gigante, se les pide que ayuden a cruzar a dos grupos de refugiados.

Una poderosa tormenta trae dolorosos recuerdos del pasado, y pone en riesgo a todos en el presente.

Después de que Sokka y Katara se enferman por haber estado en la tormenta, Aang busca una cura y descubre que necesita ranas congeladas para lograrla.

Aang, Katara y Sokka descubren un pueblo en el que las personas confían en una adivina en sus vidas diarias, pero confían tanto que no ven el peligro inminente en que se encuentran.

Aang se siente inseguro cuando Katara y Sokka se encuentran con algo que les recuerda su hogar. Como Aang piensa que sus amigos podrían abandonarlo, les oculta un importante mensaje, lo cual genera problemas.

Aang intenta encontrar a un maestro de Fuego que le enseñe, mientras Katara se entera de que posee un poder especial.

Después de oír rumores sobre maestros del Aire sobrevivientes, los chicos viajan al templo de Aire del Norte para verlos con sus propios ojos. Lo que encontrarán allí podría significar un desastre para todos los enemigos de la Nación del Fuego.

Los chicos llegan a la tribu del Agua del Norte, y Aang y Katara buscan a un maestro del Agua mientras Sokka se enamora de una princesa. Mientras tanto, Zhao planea un ataque y Zuko debe encontrar una forma de continuar su búsqueda del Avatar.

La Tribu del Agua del Norte se prepara para un ataque de la flota de Fuego del almirante Zhao. En el corazón de la batalla, Aang lucha por defender la ciudad. Se pregunta si no habrá un modo mejor de usar sus habilidades de Avatar.

La invasión de Zhao atraviesa la pared exterior de las defensas de la Tribu del Agua del Sur, y él revela un siniestro plan.