Empeños a lo bestia

A Les le presentan un objeto que supuestamente se comunica con los extraterrestres. Además, una antigua estrella del cine para adultos trae una gran caja con sus mayores éxitos.

Les desafía a Seth a una arriesgada competición de ventas. Mientras la batalla se anima, Les se enfrenta a su cliente más peligroso hasta la fecha. ¿Intervendrán los de seguridad o será Les el que pelee? Más tarde, Ashley se enfrenta a un cliente que no acepta un no por respuesta.

La tienda se convierte en un polvorín cuando cientos de clientes enfadados tienen que soportar colas de una hora. Además, Les debe averiguar si un cliente está vendiendo bienes robados. Después, los Gold reciben un viejo tractor oxidado que podría valer un montón de dinero. Y más tarde, la rivalidad entre Seth y Ashley estalla delante de todo el personal... y Les se ve obligado a intervenir.

Seth recibe una paliza cuando una negociación se convierte en un fiasco. Después, Ashley se apresura a encontrar la guitarra perdida de un cliente. Y más tarde, los Gold deben mantenerse unidos al enfrentarse a una multitud de clientes desesperados, todo ello en un día que ha generado más negocio del que suelen ver en dos semanas.

Un cliente enfadado afirma que le han vendido un reloj falso. Los Gold deben demostrar que son expertos en la materia y salvar su reputación. Además, Les compra un cráneo de elefante.

Un jugador visita la casa de empeños en busca de fondos. Los Gold apuestan a que tendrá un gran éxito, pero ¿están tentando a la suerte? Después, Les pide refuerzos a los de seguridad cuando una discusión por un objeto perdido se vuelve violenta. Y más tarde, las cosas pasan de lo excéntrico a lo disparatado cuando un cliente intenta vender la camilla de un ginecólogo.

La situación se anima cuando se pide a un empleado que se quite la ropa y pruebe una máquina de bronceado. Una clienta intenta vender su pulsera de oro, pero Les le dice que es falsa, así que la mujer se enfada con él y con el hombre que se la regaló. Y más tarde, Seth debe determinar si un reloj de oro tiene un valor inestimable o ninguno.

Les hace una compra impulsiva nada propia de él que convierte la casa de empeños en una sala de juegos recreativos. Después, un cliente amenaza a Ashley cuando una negociación va demasiado lejos. Más tarde, Les concede un gran préstamo a una clienta que le cuenta una historia triste e insólita. ¿Devolverá el préstamo como ha prometido o habrá desplumado a Les?