Tierra de lobos

Fernando Bravo regresa a Tierra de Lobos para convencer a Aníbal y Román de que le ayuden a llevar a cabo un descabellado plan para rescatar a César: entrar a robar en casa de la Duquesa de Gózquez con el fin de conseguir suficiente dinero para comprar su liberación. Por otro lado, Nieves intentará por todos los medios destrozar la imagen de Elena frente a su padre.

Después de que Fernando Bravo haya dejado encerrados a Aníbal y Román en el palacio de la duquesa, los dos hermanos conocerán a Hugo, alguien con quien comparten más de lo que creen. Por su parte, Lobo descubrirá que el padre de los Bravo sigue vivo y no parará hasta vengarse de él. Además, el terrateniente le ofrecerá al militar la mano de una de sus hijas.

Después de la fatídica muerte de Román a manos de La Duquesa, la vida de Aníbal correrá serio peligro. Sin embargo, la llegada de Fernando Bravo en el último momento salvará a su hijo bastardo de correr la misma suerte que su hermano, al desvelar la identidad de su verdadera madre. Por su parte, Hugo Bravo decidirá quedarse en Tierra de Lobos.

Con César condenado a pasar el resto de su vida en una prisión africana y los restos de Román descansando bajo tierra, Lobo hará todo lo que esté en su mano para apoderarse por fin de La Quebrada, sin importarle que su hija Almudena sea ahora la nueva administradora de la finca. Sin embargo, el cacique no tendrá en cuenta que aún queda un heredero legítimo de Fernando Bravo.

La desaparición del bebé de Almudena resucitará la leyenda entre los habitantes de Tierra de Lobos de que la familia Lobo está maldita. A raíz de este hecho, Almudena, Aníbal y el Teniente Ruiz emprenderán una difícil empresa en la que todo el mundo estará bajo sospecha. Entretanto, Isabel no consigue adaptarse a su nueva vida como mujer casada, por lo que, su marido empezará a desconfiar de ella.

El hijo de Almudena sigue desaparecido y todas las sospechas caerán sobre Álvaro, el capataz de Casa Grande, que será interrogado en la comisaría. Sin embargo, los secuestradores contactarán con la madre del pequeño para pedirle un rescate. Por otro lado, Miguel le cuenta a su madre que las cartas que ella le manda a su abuelo están en posesión de Lobo.

Uno de los secuestradores del bebé de Almudena es capturado y el Teniente Ruiz intentará sin éxito que confiese. Sin embargo, cuando el pequeño aparece, a Álvaro, el capataz, le comerán los remordimientos, mientras que Aníbal y Hugo no descansarán hasta descubrir quién está detrás de todo. Por otro lado, reaparece la Tata y Sebastián le hace un regalo un tanto especial a Luz por su cumpleaños.

Mientras Almudena está viviendo en la Quebrada aparece León, un compañero del penal africano dónde César Bravo está cumpliendo condena. Por otro lado, después de que el Alcalde haya sido detenido por el secuestro del pequeño Antonio, éste intentará chantajear a Álvaro con sacar a la luz un terrible secreto, si no le ayuda a salir de la cárcel.

Tras la desaparición del alcalde después de los oscuros acontecimientos relacionados con el secuestro del bebé de Almudena, Tierra de Lobos se ha quedado sin autoridad municipal. Lobo aprovechará la situación presentándose como único candidato y así recuperar su poder, pero la estrategia se le vendrá abajo cuando Don Joaquín se postule para ser el nuevo edil de la localidad.

Aníbal le declara la guerra al nuevo alcalde de Tierra de Lobos al descubrir que engañó al pueblo para ganar las elecciones y que no es el salvador que pretende aparentar. En venganza, don Joaquín tomará serias represalias contra el joven. Entretanto, Elena ha vuelto con Lobo y ahora son un matrimonio aparentemente feliz. El cacique ha nombrado heredero universal de sus bienes a Miguel.

Aníbal ha sido secuestrado por el Alcalde y lo llevan al monte a ser ejecutado. Escapará y tendrá que huir en lo que se convertirá en una cacería humana. Por su parte, Lobo yace en coma en la cama. Elena le ha disparado y teme que pueda despertar en cualquier momento. Álvaro la convencerá para que huya con las manos vacías. Lo que Álvaro y Elena no saben es que Nieves sospecha la verdad.

Don Joaquín, el alcalde, está cada vez más cerca de conseguir lo que ha venido a buscar y que tanto tiempo lleva debajo de La Quebrada. Sin embargo, Aníbal y Hugo intentan adelantarse. Mientras, Nieves y Rosa custodian a lobo, que permanece inconsciente en una cabaña en el bosque. Sin embargo, dos mujeres no son defensa suficiente contra los sicarios del nuevo edil.

Aníbal y Hugo descubren la entrada al misterio que se ha escondido siempre bajo La Quebrada, pero una inscripción en latín les advierte de un terrible peligro. Lobo despierta de su letargo muy aturdido y Elena duda si es capaz de recordar que fue ella quien le disparó, sin saber que el cacique lo recuerda todo y ha planeado una terrible venganza.

Tras la muerte de Lobo, los habitantes del pueblo saquean la Casa Grande. Mientras, Aníbal y Hugo encuentran un libro antiguo y unas escrituras sin valor que Don Joaquín decide eliminar. Almudena está cuidando de Nieves a la espera de un antídoto que la salve de la muerte. Por último, César Bravo se escapa de prisión para reunirse con su mujer y su hijo, pero oculta un terrible secreto.

César Bravo tendrá que pagar caro el precio por su libertad y se verá en la obligación de vender La Quebrada al perverso don Joaquín. Pero éste le comunicará que, para poder empezar una nueva vida con Almudena y su hijo lejos de allí, deberá traicionar a sus hermanos. Entretanto, comenzarán a desaparecer mujeres y niños en el pueblo, por lo que Lola pedirá ayuda a Aníbal, César y Hugo.

César tendrá que decidir si ejecuta o no a Aníbal y Hugo, mientras Almudena permanece secuestrada junto a Lola y otras mujeres bajo La Quebrada. Cuando el mayor de los Bravo se presenta ante don Joaquín para anunciarle que ya ha cumplido su parte del trato, éste le comunica que aún debe hacer más sacrificios. Por su parte, Nieves ha pagado a un asesino para que acabe con Elena.