Un paso adelante

Diana estrena el nuevo año con una actitud tan positiva que incluso pide disculpas a Ingrid por su comportamiento con ella en los últimos tiempos. La causa de este cambio tan radical es la importante determinación que Diana ha tomado durante la pasada Navidad: quiere ser madre. Pero lo más curioso de su decisión es que desea que el padre sea Juan.

Alicia Jáuregui decide introducir una nueva asignatura que se llamará Actividades Especiales. En ella, los alumnos aprenderán a desarrollar habilidades que se consideran muy importantes para completar sus conocimientos de interpretación (artes marciales, esgrima, conducción, deportes de riesgo, etc). J.J. será la profesora.

La situación en casa de Lola es cada vez peor, las facturas no paran de amontonarse y les han cortado la línea de teléfono. La estudiante sabe que no le queda más remedio que buscar un trabajo, y es Jero el que le habla de una oferta como bailarina en un tablao flamenco. Un cliente intenta sobrepasarse con ella y Lola se defiende, lo que le cuesta el puesto.

Pável se pone a bailar en el trabajo y tienta a Lola para que le acompañe, al principio ella no está muy dispuesta pero termina accediendo. Al comprobar lo bien que lo hace, Pável le habla de un concurso al que ella no quiere ir, pero la posibilidad de hacerse con un importante premio en metálico la convence.

Román recibe una carta del banco en la que le notifican que va a perder su casa por no pagar la hipoteca en los últimos meses: el inmueble se ha vendido en subasta y tienen que abandonarlo. Silvia, al enterarse de la noticia, le ofrece a Lola la posibilidad de consultar el tema con el abogado de su padre, pero cuando hablan con él ya es tarde para ayudarles.

Pável le habla a Román de un trabajo como limpiador en el mismo restaurante en el que trabajan él y su hija. Lola no sabe nada y se queda preocupada cuando lo ve allí, sin embargo tiene que aceptarlo puesto que su padre empieza a tener problemas de convivencia porque no está contribuyendo a los gastos.

La escuela está haciendo un casting para elegir a los protagonistas de "Chicago". Lola y Marta se convierten en las principales rivales en la pugna por el papel protagonista. Lola sufre una caída después de una de las pruebas y acusa a Marta como causante. Ante los profesores esta acusación sin pruebas no sólo no es válida, sino que puede ser razón para abrirle un expediente a Lola.

Rober y Jero se presentan a un casting para un anuncio de maquinillas de afeitar. Jero está seguro de que el trabajo es suyo y por eso le sienta fatal cuando se entera de que Rober se ha quedado con el puesto. Durante una clase de esgrima, en la que los dos estudiantes tienen que practicar en pareja, a Jero se le desvía el florete y araña la cara de su contrincante.

Juan ha contratado a Abraham, un importante músico cubano, para que venga a la escuela a dar unas clases. Gaspar es bastante reticente a esta iniciativa por el alto coste que supone, pero Juan le convence de que merece la pena. Pável está en la escuela y Juan, al verle, da por hecho que es Abraham.

Pável empieza a trabajar en la cafetería de la escuela y Jero culpa a Lola de que lo hayan contratado. El joven no puede evitar sentirse celoso cada vez que ve al cubano rondando a su novia. Quien también está algo molesta con la presencia de Pável en la escuela es Alicia Jáuregui, que por alguna extraña razón intenta evitarlo a toda costa.

Rober y Pablo siguen trabajando en la teleserie, pero el primero parece más preocupado por aprovechar todas las ocasiones para ligar que por su faceta de intérprete. Rober pasa la noche con una de las actrices y al día siguiente se tiene que marchar precipitadamente de su casa porque, tal y como ella le explica, sus padres están de camino.

Diana le pide colaboración a Lola para preparar una coreografía. Su intención es que la vea el director de una escuela de Sevilla que podría contratarla. Juan, al tanto de lo que planea la profesora, castiga a Lola para que no pueda ayudarla. Con lo que no cuenta es con que sea la propia Ingrid la que le eche una mano a Diana, y para colmo de males el resultado es muy bueno.

Los chicos están agobiados porque todas las actuaciones de la gira se están viniendo abajo. Cada vez que suena el teléfono de Jero es para cancelar otra de las galas. Rober decide hacer algo que les permita tener una nueva oportunidad. Los chicos deciden meterse en todo el centro de Madrid para cantar uno de los temas de UPA Dance.