Ángel o demonio

Tres jóvenes emprendedores informáticos montan una exitosa empresa dejando de lado a una compañera. Ésta regresa buscando la venganza alentada por Damián.

La hija de un empresario es secuestrada y Graziel aprovechará para emponzoñar la situación, mientras Natael y Valeria tratarán de contrarrestar la labor del caído. Juan Carlos sospecha que el bebé que espera su mujer podría ser hijo de Valafar.

Sandra, lleva casi 40 años trabajando para los Caídos a cambio de la juventud eterna. Cuando descubre el nuevo servicio que los demonios le solicitan se planteará renunciar al don prometido para no tener que enfrentarse a tan infame labor.

Damián tiene como objetivo destruir a Joel, la nueva pareja de Valeria. Trabajar mano a mano con Natael hace que la joven comience a verle con otros ojos. Además, los padres de la joven anuncian a sus hijos que han decidido romper su matrimonio.

El inspector Cortina no tarda en caer en las redes de los Caídos desgarrado por el dolor tras la muerte de su hija. Graziel y Damián le sirven en bandeja la posibilidad de torturar al responsable matando a su hijo ante sus propios ojos.

Valeria trata de recuperarse del trágico incidente, pero será tentada por Iris, Graziel y Damián que no dudarán a apelar a sus deseos de venganza. Teo, el asesino de su hermana, está a punto de salir de prisión en libertad condicional.

Una mujer desolada al enterarse de que su bebé recién nacido tiene la misma enfermedad que acabó con la vida de su hijo mayor, es tentada por los Caídos. Damián e Iris le propondrán cambiar el bebé enfermo por otro robado en un parque.

Valeria comienza a tener extraños presentimientos sobre el bebé que espera su madre. Por su parte, Adrián descubrirá el demoníaco pasado origen de Alexia y decide contárselo a Azucena, la hermana de Rubén.

Valeria comienza a tener visiones catastróficas y comparte su inquietud con Gabriel y Natael. Juntos descubren que tales premoniciones están relacionadas con el maquiavélico plan que Alexia ha tramado en solitario.